El amor propio es un estado de aprecio por uno mismo que crece a partir de acciones que apoyan nuestro crecimiento físico, psicológico y espiritual. El amor propio significa tener una gran consideración por tu propio bienestar y felicidad. El amor propio significa cuidar de sus propias necesidades y no sacrificar su bienestar para complacer a los demás. El amor propio significa no conformarse con menos de lo que se merece.
El amor propio puede significar algo diferente para cada persona porque todos tenemos muchas formas diferentes de cuidarnos. Descubrir cómo es el amor propio para ti como individuo es una parte importante de tu salud mental.
¿Qué significa para ti el amor propio?
Para empezar, puede significar:
• Hablar contigo mismo y sobre ti mismo con amor
• Priorizarte a ti mismo
• Darse un descanso de la autocrítica
• Confiar en ti mismo
• Ser fiel a uno mismo
• Ser amable contigo mismo
• Establecer límites saludables
• Perdonarte a ti mismo cuando no estás siendo sincero o amable contigo mismo
Para muchas personas, el amor propio es otra forma de decir autocuidado. Para practicar el autocuidado, a menudo necesitamos volver a lo básico y
• Escuchar a nuestros cuerpos
• Tome descansos del trabajo y muévase/estírese.
• Cuelgue el teléfono y conéctese con usted mismo o con otros, o haga algo creativo.
• Coma saludablemente, pero a veces disfrute de sus comidas favoritas.
El amor propio significa aceptarte como eres en este mismo momento por todo lo que eres. Significa aceptar sus emociones por lo que son y anteponer su bienestar físico, emocional y mental.
Cómo y por qué practicar el amor propio
Así que ahora sabemos que el amor propio te motiva a tomar decisiones saludables en la vida. Cuando te tienes en alta estima, es más probable que elijas cosas que nutren tu bienestar y te sirven bien. Estas cosas pueden ser en la forma de comer sano, hacer ejercicio o tener relaciones saludables.
Las formas de practicar el amor propio incluyen:
• Volverse consciente. Las personas que tienen más amor propio tienden a saber lo que piensan, sienten y quieren.
• Tomar acciones basadas en la necesidad más que en el deseo. Al concentrarse en lo que necesita, se aleja de los patrones de comportamiento automáticos que lo meten en problemas, lo mantienen atrapado en el pasado y disminuyen el amor propio.
• Practicar un buen cuidado personal. Te amarás más a ti mismo cuando cuides mejor de tus necesidades básicas. Las personas con un gran amor propio se nutren diariamente a través de actividades saludables, como una buena nutrición, ejercicio, sueño adecuado, intimidad e interacciones sociales saludables.
• Dar cabida a los hábitos saludables. Comience a cuidarse verdaderamente reflejando eso en lo que come, en cómo hace ejercicio y en lo que dedica su tiempo a hacer. Haz cosas, no para “hacerlo” o porque “tienes que hacerlo”, sino porque te preocupas por ti.
Finalmente, para practicar el amor propio, comienza por ser amable, paciente, gentil y compasivo contigo mismo, de la misma manera que lo harías con alguien que te importa.